El Quiebre de la Política Monetaria

martes, 5 de febrero de 2008

Waldo Mendoza Bellido

Profesor del Departamento de Economía de la PUCP

Gestión, 05-02-08

_________________________________________________________________________

La actual administración del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) ha tomado medidas que socavan el poder de la política monetaria y deshacen importantes avances alcanzados en años anteriores, dando señales de abandonar el actual Sistema de Metas Explícitas de Inflación (SMEI). La lista de medidas es larga. Se describen algunas, en orden cronológico.


  1. En el 2006, por primera vez desde la implementación del SMEI, el nuevo directorio del BCRP debutó con una inflación a diciembre de 1.14 por ciento anual, incumpliendo con el compromiso de mantener la inflación entre 1.5 y 3.5 por ciento anual. En enero de 2007, subestimando la fuerza que los choques de oferta tienen en la economía peruana e interpretando la baja coyuntural de la inflación como permanente, el BCRP anunció su nuevo compromiso de mantener la inflación en 2 por ciento anual, con una tolerancia de un punto porcentual hacia arriba y abajo. La nueva banda tuvo un estreno infeliz. La inflación acumulada a diciembre del 2007 fue de 3.93 por ciento, casi un punto por encima del techo superior de la banda.


  1. En el 2007, la inflación subyacente -la que no considera los componentes más volátiles del IPC y que por tanto es buena medida de la tendencia inflacionaria- se triplicó, pero el BCRP no reaccionó con la fuerza y la oportunidad necesaria. Ante un alza sistemática de la inflación subyacente, la autoridad monetaria debe elevar la tasa de interés real de corto plazo, aumentando su tasa de interés de referencia para el mercado interbancario en mayor magnitud que la inflación. El BCRP ha hecho lo contrario, permitiendo, durante el 2007, la reducción de la tasa de interés real de corto plazo. Esta política, sumada al optimismo de los banqueros y a la inacción de la Superintendencia de Banca y Seguros (SBS), explica también el aumento en más del 40 por ciento del crédito bancario en soles.

  2. En el 2007, el BCRP ha fomentado innecesariamente el incremento del crédito bancario en dólares elevando la remuneración al encaje, justo cuando el banco central norteamericano (FED), reducía la tasa de interés. Este es un estímulo al ingreso de capitales de corto plazo y a la dolarización de las operaciones bancarias, que genera una mayor vulnerabilidad externa. Los pasivos externos de corto plazo de las empresas bancarias subieron de US$ 720 millones a principios del 2007, a más de US$ 3000 millones al finalizar el año.


  1. Por último, y quizá lo más grave, las señales recientes de política monetaria sugieren que estamos asistiendo al final del Sistema de Metas Explícitas de Inflación creado en el 2002. En primer lugar, porque parece que el control de la inflación ha dejado de ser el objetivo central de la autoridad monetaria. El Presidente del BCRP ha declarado que “no se trata de hacer locuras para estar cumpliendo con una meta de inflación”. En segundo lugar, porque se está destrozando el principal instrumento de la política monetaria, al crear durante los últimos quince días una brecha inmensa entre la tasa de interés de referencia y la tasa de interés interbancaria que rige efectivamente en el mercado. La tasa de interés de referencia ya no sirve de referencia para fijar las tasas de interés de corto y largo plazo que afectan al consumo y a la inversión. Se está abandonando, al parecer, este instrumento de la tasa de interés de referencia, para retornar a un anticuado control de agregados monetarios con tasas interbancarias flotantes, en desuso hoy en día.


En las condiciones actuales, para capear la tormenta externa que se está gestando en la economía mundial, se requeriría de una política monetaria contractiva que produzca una desaceleración gradual y delicada de la demanda interna, en el contexto de una política fiscal expansiva. Sin embargo, con el Sistema de Metas Explicitas de Inflación casi completamente derruido, es imposible tener una política monetaria clara y predecible, que guíe efectivamente las expectativas del sector privado y los banqueros en la dirección deseada.



Actualidad Económica del Perú

Aportando al debate con alternativas económicas desde 1978

Archives